Dios te creó con un propósito, Él te creó para tener una relación personal con Él, como un Padre amoroso. Él nos hizo de tal manera que naturalmente buscamos esa relación para llenar nuestras vidas. Por eso la gente busca placer, éxito, o paz a través de la meditación. Por eso la gente suele recurrir a las drogas y al alcohol, e incluso a medicamentos, pero no les es suficiente. Siempre andamos buscando, pero nunca encontraremos porque la relación con Dios no es material.

Conocer a Dios comienza por ser honesto y aceptar que algo anda mal. Ese mal se llama pecado, significa que rechazas el camino de Dios y eliges el tuyo propio. Eso puede parecerte audaz o valiente, pero en realidad sólo te conducirá al fracaso y a la derrota. Si no sigues el camino de Dios, cualquier otro camino te alejará de Él - eso es el infierno. El pecado te aleja de Dios.